¿QUE ES LA ECONOMIA?

Repito la pregunta que le publiqué hace un cuarto de siglo en un artículo titulado “¿Sólido, líquido o gaseoso?” Vuelvo a este tema porque en las últimas décadas tanto el Perú como la mayoría de los países han logrado avances significativos en los niveles de producción y consumo, y estas experiencias favorables aclaran mucho sobre el desarrollo económico. Según estadísticas de las Naciones Unidas, el crecimiento económico mundial durante las últimas tres décadas se ha basado en gran medida en la expansión a gran escala de servicios de alta calidad.

Ni Adam Smith ni Karl Marx intentaron llegar a tal conclusión. Sus ideas, compartidas por la mayoría de sus partidarios, eran esencialmente una actividad económica material destinada a aumentar la oferta de bienes como alimentos y productos manufacturados. La economía se entiende como una fábrica en la que las máquinas reciben recursos materiales y los procesan, siguiendo leyes similares a las de la ingeniería. A pesar de sus diferencias políticas, Smith y Marx coincidieron en la naturaleza puramente física del significado de la producción económica. Aunque el concepto de producto nacional bruto aún no existía en las estadísticas económicas, los resultados económicos presentados por ambos pensadores se limitaban a los bienes materiales. Para Smith y Marx, los servicios no tienen valor económico. Por tanto, el desarrollo predicho por ambos padres de la economía se manifestaría sólo en un fuerte crecimiento de la actividad industrial. Hoy en día, el concepto económico moderno incluye los servicios, pero la idea de la primacía o mayor importancia de la producción física fabril sigue siendo obsoleta.

Hoy en día hablamos a menudo de la industrialización como una importante herramienta y objetivo del desarrollo económico, y para muchas personas, la industrialización es casi sinónimo de desarrollo. Sin embargo, más allá del punto de vista de los economistas, el sector de servicios se ha convertido recientemente en el principal motor del crecimiento económico. Por ejemplo, en los países de la OCDE, la producción industrial genera sólo el 15% de la producción total de estos países, mientras que el valor de los servicios producidos en estos países representa el 70% del valor total de sus economías. Por ejemplo, en muchos de los países más desarrollados, el crecimiento del sector de servicios ha sido responsable de gran parte del crecimiento de las últimas décadas.

La mayoría de la gente todavía no comprende qué crea o puede crear valor económico. Mi hipótesis para explicar el crecimiento de los servicios tanto en los países más desarrollados como en los menos desarrollados es que el aumento de la oferta y la demanda de servicios específicos en las últimas décadas se debe a dos cambios muy importantes en la vida humana.

En primer lugar, el nivel de vida general ha aumentado, lo que ha permitido un mayor gasto en cosas que hasta hace poco se consideraban "lujos". En segundo lugar, porque aumenta la capacidad de brindar servicios debido al proceso de urbanización, es decir, debido a la distancia geográfica, abriendo muchas oportunidades para brindar y recibir servicios valiosos, pero requiere una comunicación rápida y barata de las necesidades con los proveedores. y esto ahora es posible en entornos urbanos. La proximidad de la ciudad ha aumentado las posibilidades de intercambio, tanto amistoso como remunerado, permitiendo a las personas adquirir o adquirir conocimientos, ideas, tratamientos específicos, apoyo parcial, ya sea a través de formas formales como la academia o la consultoría, o a través de relaciones sociales de amistad. . o crear contactos informales. En cualquier caso, la vida urbana actual, replicada de manera enorme, facilita un auge del intercambio, la especialización y los segundos empleos, junto con los servicios más formales de las grandes empresas y los gobiernos; esto también es posible en la medida en que los costos del intercambio se han reducido significativamente. reducido. por cercanía.

Autora: Richard Webb. Fuente: Diario El Comercio- pag.20, 10 de marzo del 2024.