TARIFAS DE LUZ: ¿SEGUIRÁN SUBIENDO?

El alza del dólar tiene en vilo a la población debido a la reacción en cadena que ha desatado sobre los precios del pollo, el aceite, el gas licuado y otros productos con un alto componente importado, todos los cuales han subido de manera alarmante en las últimas semanas.

Tal es lo que podemos observar día a día. Pero hay otros efectos que no son apreciables a simple vista, como el impacto en los precios de los servicios básicos, que también cuentan con un esquema dolarizado.

Es el caso de la tarifa eléctrica, que subió 3,45% para los hogares y 3.9% para las industrias, desde el 4 de agosto, según dio a conocer Osinergmin.

El embate del dólar

Se trata del mayor incremento mensual en lo que va del 2021, año caracterizado, más bien, por reajustes a la baja y aumentos leves atribuibles a factores exógenos, como los mayores precios del cobre y el aluminio (utilizados en las redes de distribución eléctrica).

Agosto, por el contrario, atestigua un salto significativo del tipo de cambio, componente "que explica el 80% del aumento tarifario". anota Luis Espinoza, ex viceministro de Energía.

Vale aclarar que las tarifas eléctricas se reajustan mes a mes, conforme a una fórmula matemática que maneja Osinergmin y que tiene como principales indicadores: el precio del cobre, el precio del aluminio, el índice de precios al por mayor (inflación) y el tipo de cambio.

Y también el ingreso de nuevas líneas de transmisión, cuyos costos se cargan el peaje de transmisión eléctrica (tarifa) debido a que cuentan con ingresos garantizados, anota César Butrón, presidente del Coes.

Ejemplo de esto es la línea Aguaytía-Pucallpa (segunda etapa) que indicó operaciones recientemente.

El alza del tipo de cambio constituye, sin embargo, la principal preocupación, porque afecta la economía de las familias y porque "nos sorprende en un punto crítico, que es tener la segunda tarifa eléctrica más cara del continente", apunta pedro Gamio, ex viceministro de Energía.

Espada de Damocles

La amenaza es serio, porque todos los contratos eléctricos que rigen en los mercados libre (comercios e industrias) y regulado (hogares) están vinculados a la moneda estadounidense.

"Por tanto, si el tipo de cambio sube, las tarifas eléctricas van a seguir la misma tendencia. Y no solo la electricidad, también el gas natural y todos los hidrocarburos", comenta Espinoza.

¿Qué significa esto para las tarifas de electricidad en el corto plazo?

Espinoza explica que los reajustes tarifarios solo derivan en un alza acusada cuando los factores acumulados superan un techo (gatillo) de 5% de incremento, como ocurrió entre julio y agosto, debido a la subida del tipo de cambio.

Esto significa que si este componente vuelve a subir en los próximos días, pero sin rebasar el gatillo, no desencadenará un nuevo salto tarifario el próximo mes.

"Sin embargo, acota Espinoza, todos los incrementos en el tipo de cambio se irán acumulando hasta gatillar una nueva alza en algún momento del futuro, así sea de forma retrasada".

¿Qué se puede hacer para evitar que las tarifas sigan subiendo?

¿Futuro gris?

A estas alturas queda claro que la principal razón del alza del tipo de cambio es la desconfianza de la población hacia las políticas del Gobierno, las cuales conducen a la fuga de capitales y la compra masiva de dólares.

De allí la importancia de generar confianza para acallar las expectativas negativas, anota Gamio.

"Se puede ser un gobierno de izquierda o de derecha, pero se puede generar confianza en el capital, como hicieron los gobiernos socialistas de Michelle Bachelet en Chile y Felipe Gonzáles en España", refiere el especialista.

En última instancia, señalan especialistas consultados por Día 1, el Gobierno puede anular el efecto del tipo de cambio introduciendo variaciones en la fórmula de reajuste de las tarifas.

Cualquier cosa, menos ceder ante la tentación fijar el precio del dólar o atentar contra los contratos, como propone la bancada de Perú libre en su proyecto de ley 022-2021.

El momento es delicado, puesto hace suponer que las tarifas eléctricas seguirán subiendo, debido a reajustes motivados por movidas en el tipo de cambio o la incorporación de nuevas líneas de transmisión.

Y también por razones estructurales, como la posibilidad de que los nuevos contratos de distribución que se firmarán próximamente "salgan con precios más altos" debido a la declaración de precios del gas natural.

Veremos qué sucede.

Publicado en el Comercio, 16 de agosto del 2021.