¿Qué planes idea Perú-Petro para sacar al sector de la crisis?
Propone revisar el sistema de EIA en el sector petróleo, reducir el tamaño de nuevos lotes y evaluar la rebaja de regalías
Situaciones extremas requieren medidas extremas. La persistente caída de la producción de petróleo y la continua devolución de lotes por parte de las empresas (dieciséis en los últimos cuatro años), debido a aspectos socioambientales, han motivado que Perú-Petro reevalúe toda su estrategia y formule propuestas para enderezar el sector en el actual contexto de bajos precios del crudo.
“Nuestro diagnóstico es que la producción de los nuevos lotes [exploratorios] demorará entre 5 y 10 años para ingresar al pipeline. Por eso, debemos concentrarnos en aquellos que ya producen petróleo para mejorar sus operaciones”, refiere Rafael Zoeger, presidente de la agencia de hidrocarburos.
Para conseguir este objetivo, Perú-Petro ha elaborado una serie de propuestas que van desde la revisión de las dimensiones de los lotes (hacerlos más pequeños es una opción que se maneja) hasta el reemplazo de los estudios de impacto ambiental (EIA) por declaraciones juradas, siguiendo ejemplos de países petroleros en otras latitudes.
Estos planteamientos serán plasmados en un informe que será expuesto ante funcionarios de las carteras de Energía y Minas, Ambiente, Cultura y Economía y Finanzas, para su correspondiente debate en las próximas semanas.
propuesta ambiental.
Según estadísticas de Perú-Petro, hay 30 lotes petroleros paralizados: 13 de ellos por demoras relacionadas con la aprobación de los EIA y 11 por problemas sociales.
Para ayudar a las empresas a solucionar estas dilaciones, la agencia petrolera propone encargarse de la realización de los estudios de base ambiental, ya sea por cuenta propia o subcontratando la actividad.
Asimismo, propone que los EIA sean reemplazados por declaraciones juradas, previa evaluación de las características intrínsecas de cada proyecto, particularmente, en la selva. Ello, debido al elevado costo (US$1 millón a US$3 millones) y al tiempo que demanda la elaboración de cada expediente.
“En otros países no existen los EIA. Las empresas cumplen con la ley y si no lo hacen el Estado les quita los contratos. Acá hay una exageración. Por eso, Perú-Petro debe ser capaz de decir a las compañías: la mesa está servida. Acá está tu estudio ambiental y quiero que en un año estés perforando”, remarca Zoeger.
Perú-Petro también evalúa revisar las regalías petroleras, sentarse a conversar con Petro-Perú para rebajar la tarifa de transporte del Oleoducto Norperuano y recortar el tamaño de algunos de los 32 lotes que relanzará en el 2016 para que la exploración no se resienta.
Publicado por Diario El Comercio ( 02 de Noviembre del 2015)