AUTOR: The Economist
El Precio del petróleo ha vuelto a subir. ¿ PERO SERÁ UNA TENDENCIA DURADERA?
La fase uno del plan de Arabia Saudita para reestructurar el mercado del petróleo está durando más de lo esperado. Al rehusarse a frenar a frenar su producción mientras los precios caían, los saudís permitieron que surgiera una enorme excedente y, de esa forma, notificaron a sus rivales con costos de producción más elevados (Rusia, Venezuela y los productores de petróleo de esquisto estadounidenses) que no sostendrían los márgenes de otros a expensas de su participación de mercado.
Pero esa señal se ha ido debilitando con el creciente volumen de tanto con el creciciente volumen de petróleo almacenado, que aumentó en 265 millones de barriles el año pasado. El banco francés Société Générale estima que en los primeros seis meses de este año el incremento será de 300 millones de barriles.
El petróleo está siendo acopiado con la esperanza de que la demanda y los precios se recuperen más adelante. Dicho reaprovisionamiento, más las renovadas preocupaciones políticas, han empujado el precio al alza y tras haber caído más de 60% desde junio, el barril de petróleo Brent cerró en US$ 59.96 el 18 de febrero.
Sin embargo, el reaprovisionamiento no puede continuar por mucho tiempo. Las instalaciones de almacenamiento en Europa y Asia se encuentran al 80% de su capacidad y de acabarse el espacio, los precios podrían volver a desmoronarse. Que ocurra o no dependerá de cuán rápido entre en práctica la fase dos del plan saudí, consistente en forzar a los productores caros para que amplíen la influencia de los países del Golfo Pérsico.
El mercado está obsesionado con el número de pozos en operación. Los analistas piensan que si la cifra cae, la producción de petróleo de esquisto también lo hará y afectará las ganancias y la inversión, aunque este argumento parece discutible.
El número de pozos en Estados Unidos a mediados de febrero era 35% menor del pico que alcanzó en octubre del 2014, pero la mayoría está en zonas marginales pues la reducción ha sido de solo 9% en las principales cuencas de esquisito.
Además, la productividad está creciendo en los pozos operativos y Citibank estima que incluso una reducción de 50& en el número de pozos haría posible un aumento de la producción este año y volvería positivo el flujo de caja de las empresas, lo cual incentivaría la inversión.
La OPEP señala que la producción de sus miembros crecerá en 400, 000 barriles diarios este año, aunque otros piensan que será más. La oferta fuera de la OPEP aumentaría el doble. Se estima que la demanda se mantendrá estable en la primera mitad del 2015 y luego crecerá en 2 millones de barriles diarios. De acuerdo con la mayoría de cálculos, la sobreoferta durará algún tiempo.
Para el largo plazo, los productores creen que el declive será prolongado, lo que impulsaría una reestructuración del sector. Las grandes compañías han anunciado recortes en su gasto de capital de más de 20 % para este año, en tanto que la cantidad de nuevos descubrimientos se reduce estrepitosamente - el2014 fue la más baja en 60 años-. Esto regocijará a los estrategas saudís.
Publicado por Diario Gestión ( 24 de Febrero del 2015)