Valor del agua y gestión eficiente
Por:LUIS LUJAN CARDENAS
Las retribuciones económicas por el uso del agua (doméstico, industrial, hidroeléctrico, minero, etcétera) están en un nivel muy bajo en el Perú, según la opinión de Thierry Davy, de la Oficina Internacional del Agua (OIAGUA) de Francia, en su última visita a Lima, a mediados de año, cuando dictó una conferencia en la Autoridad Nacional del Agua.
El reconocido especialista hídrico estará presente nuevamente en el Perú en el simposio internacional Importancia del valor del agua. Lecciones y retos, que la ANA llevará a cabo los días 20 y 21 de noviembre.
Este evento congregará a 200 invitados del Gobierno, la empresa privada y organizaciones sociales, que se informarán sobre la experiencia en Europa y América Latina respecto a las retribuciones económicas que tanto impulso y éxito están dando a la gestión de recursos hídricos en algunos puntos del mundo.
¿Qué es el valor del agua y qué son las retribuciones económicas? En el siglo XXI, el agua está adquiriendo cada vez más un mayor valor, por múltiples factores, pero esencialmente por su escasez.
Este valor ahora está determinado por los factores social, cultural, ambiental y económico, y hasta político y mediático.
La retribución económica es el pago o justiprecio por el uso del agua, donde la industria y la actividad empresarial son los mayores aportantes. Estos recursos son destinados para el fortalecimiento de la gestión integrada de los recursos hídricos, lo que permitirá el acceso y oportunidad en calidad y cantidad del agua en beneficio de todos los peruanos.
Dicha gestión constituye una herramienta indispensable para hacer realidad la inclusión social, en el marco de un desarrollo nacional sostenido y en democracia.
La retribución económica –que nada tiene que ver con la tarifa que pagamos por el consumo de agua potable a Sedapal o sus similares en provincias– hará posible hacer realidad el Sistema Nacional de Gestión de Recursos Hídricos, donde todos los actores decidirán el mejor destino del agua en el territorio nacional, considerándolo un derecho ciudadano y una herramienta fundamental para la vida y el progreso.
Habida cuenta de las diferentes realidades, Thierry Davy reveló que la citada OIAGUA de Francia recauda anualmente dos billones de euros a través de las contribuciones económicas (80% por vertimientos y 20% por uso del agua), mientras que en el Perú solo recaudamos 50 millones de soles.
En nuestro país tenemos que administrar 159 cuencas en las vertientes hidrográficas del Pacífico, el Atlántico y el lago Titicaca, con un volumen anual de agua de 1'768,172 millones de metros cúbicos, que nos ubica entre los 20 países con mayor reserva hídrica en el mundo.
El problema que hay que enfrentar adecuadamente es que el 50% del agua superficial (ríos, lagos, lagunas y manantiales) se encuentra contaminado y el 70% del recurso hídrico de los ríos se pierde en el mar por falta de infraestructura de almacenamiento.
Más de 10 millones de peruanos no tienen acceso al servicio de agua potable. Esta es una de las razones fundamentales por las que necesitamos una mejor gestión del agua.
Publicado por Diario El Peruano (Noviembre del 2012)