Greenpeace cumple 40 años de temerarias protestas

Todo comenzó con una protesta contra ensayos nucleares en Alaska
Actos obligaron a gobiernos tomar atención a los temas ecológicos



Greenpeace dio lecciones de desobediencia civil a potenciales militantes este fin de semana en el marco del 40º aniversario de la organización ecologista en Vancouver: los jóvenes aprendieron desde encadenarse para no ser arrestados hasta a hacer barreras humanas.

"No pueden esperar siempre que otra persona venga a salvar el mundo", señaló la instructora Jessie Schwarz a los participantes.
Los talleres de desobediencia civil fueron organizados en el marco del festival de la organización ecologista en Vancouver, sitio donde nació Greenpeace hace 40 años.
El 15 de setiembre de 1971, el barco Greenpeace dejó Vancouver para ir a protestar contra los ensayos nucleares estadounidenses en la isla Amchitka, en Alaska. Pese a que el barco fue bloqueado por los guardacostas estadounidenses, la campaña contribuyó a poner fin a los ensayos en 1972 y marcó el primer acto de desobediencia civil de Greenpeace.
Más recientemente, contó Schwarz, los militantes se encadenaron a varios camiones en las arenas bituminosas de Alberta, desplegaron una bandera gigante en la que se leía "la inacción respecto al clima cuesta vidas" sobre el techo del Parlamento canadiense y pegaron etiquetas con la palabra "contaminado" sobre los alimentos genéticamente modificados en tiendas del mundo entero.
Cuando se lanza una acción, hay que ser claro con las intenciones, explicó Schwarz antes de preguntarle a los participantes hasta dónde serían capaces de llegar.
La mayoría está dispuesta a bloquear una ruta para impedir a los empleados asistir a trabajos que perjudican al medioambiente. La mitad de ellos se sienten listos para manifestarse en el terreno privado de un director ejecutivo, pero son pocos los que aceptan la idea de verter azúcar en la reserva de gasolina de una máquina y uno solo aceptó la posibilidad de lanzar una granada fumígena a policías.
Es difícil definir la no violencia, explicó Schwarz, pero Greenpeace se prohíbe "lastimar a otro ser vivo". Según ella, la violencia es contraproducente.


Atención
Fue únicamente gracias a la desobediencia civil que la mayoría de los gobiernos tomaron en cuenta el tema medioambiental, afirmó Tzeporah Berman, una de las responsables de las campañas para el clima y la energía en Greenpeace internacional.
Greenpeace, que nació en la confrontación, se reúne a menudo con jefes de empresa y de Estado, pero a juicio de Berman "sin el conflicto no habríamos obtenido la (misma) colaboración".
"Luchamos por el futuro de nuestros hijos y de nuestros pequeños niños", dijo a los asistentes del festival el director internacional de Greenpeace, Kumi Naidoo, desde la sede social de la organización en Amsterdam.


Homenaje de la ciudad

El alcalde de la ciudad de Vancouver plantó un cedro y declaró el Día de Greenpeace para conmemorar los 40 años de que la organización ecologista fuera fundada allí.
"Gracias a los visionarios", señaló el alcalde, Gregor Robertson, a un grupo de líderes internacionales y locales de Greenpeace, rodeado de algunos funcionarios y decenas de militantes.
"No hagan olas", el nombre original del movimiento que nació para protestar contra la guerra de Vietnam, se rebautizó como Greenpeace, y en pocos años superó las fronteras de su lugar de origen.
Los fundadores afirman que Vancouver, con su pintoresco entorno de océano, montañas y bosques y una población diversa, fue clave para iniciar la organización.


 

Publicado por Web El Pais.com (21/09/2011).