Alemania apuesta por el hidrógeno
Las empresas Daimler y Linde han
acordado construir 20 estaciones de abastecimiento de pilas de hidrógeno en
Alemania. De esta forma crearán una red que permitirá conectar las principales
ciudades del país en un vehículo potenciado con este tipo de combustible, aún en
investigación para explotar sus fines comerciales.
Alemania quiere dar un impulso al hidrógeno como fuente energética construyendo
20 estaciones para abastecer vehículos que funcionen con esta tecnología. En
estos momentos existen alrededor de 30 en el país, pero sólo 7 de ellas están
abiertas al público.
Las nuevas estaciones serán construidas por el fabricante de coches Daimler y el
grupo tecnológico Linde. No harán posible la comunicación por todo el país, pero
sí servirán para conectar las ciudades más importantes. Por tanto, un vehículo
que funcione con Hidrógeno podrá viajar desde Berlín a Hamburgo, Stuttgart o
Munich por las carreteras principales.
El hidrógeno como combustible es una de las energías en la que están puestas las
esperanzas para un futuro próximo. Se trata de una forma de generar electricidad
cuyo único residuo es el vapor de agua. Sus propiedades como fuente energética
se conocen desde hace 150 años, pero la primera estación de uso comercial se
abrió en 1999, precisamente en Alemania.
“El desarrollo de la movilidad mediante electricidad se caracterizará
intensamente por la pila de combustible de Hidrógeno”, indica Wolfgang Reitzle,
presidente de Linde, que considera importante esta acción para “promocionar la
madurez del mercado de vehículos basados en hidrógeno”.
Impedimentos al hidrógeno como combustible
Hay ciertos aspectos que dificultan la puesta en marcha a gran escala del
hidrógeno como fuente de energía. Existen problemas de almacenamiento, aunque el
compuesto se haga líquido se requieren tanques más grandes que los utilizados
para la gasolina para generar la misma cantidad energética.
Además, el almacenamiento del hidrógeno necesita unas condiciones extremas. La
temperatura a la que tiene que estar el compuesto para mantenerse en estado
líquido es de -252,87 grados centígrados (tan solo 20 grados por encima del cero
absoluto) y las medidas de seguridad deben ser máximas.
Otro de los inconvenientes es el precio. Daimler ha fabricado un vehículo que
funciona con hidrógeno pero aún no ha desvelado cuál es su coste. Los analistas,
en cambio, calculan que la construcción de un coche de este tipo costaría unos
100.000 dólares, aunque esperan que para 2015 esta cifra se reduzca a la mitad.
Publicado por Web Ecoticias.com (29/08/2011).