Cada peruano come 63 kilos de
transgénicos al año
Los productores de maíz le piden al INIA
la experimentación con esos productos .
Los productores de maíz amarillo duro ya
estarían preparados para hacer ensayos de campo con semillas transgénicas . Por
eso exigen al INIA, órgano ejecutor del reglamento de Bioseguridad Agropecuaria
y Forestal, para que autorice los ensayos de investigación con estas semillas.
¿En qué zonas se pueden experimentar? “En todas las zonas de la costa y una
parte de la selva (Loreto, San Martín y Ucayali). En sierra no, pues debemos
cuidar a los productos autóctonos como el maíz gigante del Urubamba”, opinó
Julio Iglesias, presidente de la Asociación Nacional de Productores del Maíz y
Sorgo.
Señaló que si se introduce este tipo de semillas, la productividad del campo
maicero se incrementará de 4.2 a 9 toneladas por hectárea.
Comentó que la publicación del reglamento ha sido necesaria, toda vez que en el
país ya consumimos productos transgénicos. Estimó, por ejemplo, que cada año
importamos alrededor de1.9 millones de toneladas de maíz (60% de la demanda
nacional). “Esto significa que cada peruano consumo al año 63 kilos de maíz en
carnes y aceites”, comentó Iglesias.
Derogatoria
De otro lado, los parlamentarios del Partido Nacionalista y UPP han presentado
un proyecto de ley para derogar el Decreto Supremo 003-2011 (que reglamenta los
transgénicos).
Asimismo, la iniciativa dispone “la prohibición de la importación, producción,
comercialización, procesamiento y/o empleo de organismos transgénicos”. Agrega
que la transgresión de lo anterior será reprimida con pena privativa de la
libertad no menor de tres ni mayor de cinco años.
Finalmente, la propuesta de ley de moratoria ya fue aprobada en la Comisión de
Pueblos Andinos, falta en la Comisión Agraria. Pero hay interés de los
legisladores por aprobar esta medida.
Publicado por Diario Gestión.com (12/05/2011).
La gastronomía peruana y los
ecologistas se alarman ante los transgénicos
El más célebre chef peruano y los defensores de la biodiversidad
temen los efectos que tendrá sobre la reputada gastronomía de Perú y sobre
la agroexportación una norma, férreamente defendida por el gobierno, que
quiere facilitar el ingreso de semillas transgénicas al país.
Un reglamento dictado hace tres semanas por el gobierno del presidente Alan
García ha recibido duras críticas por parte de diversos sectores que señalan
que, tras esa norma, se encuentran poderosos intereses económicos que buscan
el ingreso de esas semillas genéticamente modificadas.
"El gobierno está absolutamente a favor del ingreso de los transgénicos pues
sólo ha escuchado la voz de las empresas transnacionales que las promueven y
de sus procuradores y cabilderos criollos", dijo a la AFP Reynaldo Trinidad,
experto en temas agrarios.
Para dictar ese dispositivo el gobierno no consultó con las comunidades
indígenas y menos con los agricultores y gastrónomos involucrados en el
universo de la biodiversidad, que es el mayor patrimonio vivo, compatible y
renovable que posee Perú, advirtió Trinidad.
Gastón Acurio, el chef peruano de mayor prestigio y promotor de la
gastronomía peruana en el exterior, reclamó en la radio RPP que se abra un
debate "en que se pongan en la mesa los intereses del país y no los
intereses particulares de personas que buscan el ingreso de las semillas
transgénicas".
Hizo notar que hay biólogos, científicos, economistas, agrónomos,
campesinos, pequeños, medianos y grandes agricultores en algunos casos a
favor y muchos otros en contra; lo que se necesita, bajo el principio de
defensa de la biodiversidad, es buscar cuál es la verdad que más le conviene
al Perú".
"Pero lo que no se puede hacer es aprobar un reglamento a rajatabla tan
cuestionado en una situación tan polarizada", aseveró.
Acurio anotó que incorporar la "marca transgénica" quitará valor "a todo lo
conquistado hasta el momento con la agroexportación de espárragos,
pimientos, alcachofas, cítricos, café orgánico, cacao orgánico, plátano;
ninguno de estos productos son transgénicos".
Remarcó que el consumidor internacional apuesta por el consumo de una
agricultura peruana basada en productos libres de transgénicos, que tenga el
sello de orgánica.
"En la medida que no tengamos la certeza absoluta de que nuestra
biodiversidad va a verse afectada, tenemos que blindarla ante cualquier
amenaza", enfatizó.
En el Congreso, gremios agrarios han presentado ante la comisión de
Agricultura una propuesta de moratoria al ingreso de transgénicos por un
periodo de quince años para permitir un estudio en profundidad del tema.
"Es importante recordarle a los congresistas su responsabilidad, y cuidado
con los lobbys", alertó Acurio, mientras que Trinidad señaló que esa es la
salida que es respaldada por todas las organizaciones agrarias.
Por su parte, el presidente Alan García -ante la ola de críticas al
reglamento dictado por su gobierno- dijo que el tema debe ser abordado
"seriamente y sin apasionamientos porque hay muchos intereses económicos en
pro y en contra", a la vez que reclamó la opinión de los expertos.
Dijo que no se puede abrir sin condicionamientos el país a los transgénicos,
pero que también le parece mal rechazar el ingreso de todos esos productos.
Los transgénicos son alimentos obtenidos de un organismo al cual le han
incorporado genes de otro con el fin de obtener mejoras. Pero esta
modificación genética es cuestionada por ecologistas, que consideran que
esta manipulación es un riesgo para los productos orgánicos y puede
contaminarlos.
Además podrían provocar en las personas enfermedades de tipo canceroso,
afirman sus detractores.
Los defensores de los transgénicos consideran que estas modificaciones
mejoran la productividad en un momento que el mundo está pasando por una
crisis alimentaria y que además se obtienen cosechas resistentes a plagas.
Publicado por Web Terra.com (17/05/2011).