China será sede de Solar Decathlon junto a Estados Unidos y España
Los presidentes de Estados Unidos, Barack Obama, y de
China, Hu Jintao, han llegado a un acuerdo para que Solar Decathlon se
celebre en China en 2013. Así el concurso solar se convierte en una nueva
herramienta para mejorar la cooperación entre Estados Unidos y China en
temas como el cambio climático, las energías renovables y el medio ambiente.
Solar Decathlon nació en Estados Unidos como una aplicación práctica desde
el ámbito universitario de la energía solar a la edificación y se ha
convertido en uno de los foros internacionales más prestigiosos sobre
viviendas solares. Desde Washington la experiencia se trasladó a Europa. Su
sede en el viejo continente ha sido Madrid, donde en 2010 se celebró la
primera edición europea y donde se preparara la de 2012.
Ahora, Solar Decathlon da el salto a Asia y lo hace convirtiendo a China en
su tercera sede. El acuerdo se cerró con la firma de un memorándum entre el
Departamento de Energía de EEUU, la Administración Nacional de Energía
China, Peking University y Applied Materials, en el que se fijaba la
celebración de Solar Decathlon China en 2013.
El primer contacto del gigante asiático con la competición solar se produjo
en 2010 cuando dos universidades chinas (Tianjin University y Tongji
University) participaron en la edición europea celebrada en Madrid. Tongji
University repite, ya que es uno de los 20 equipos seleccionados para
participar en Solar Decathlon Europe 2012.
Javier Serra, subdirector general de Innovación y Calidad de la Edificación
de la Secretaría de Estado de Vivienda y Actuaciones Urbanas del Ministerio
de Fomento, ha valorado positivamente la implicación del gobierno de Pekín
ya que “el que China, un país con más de 300 universidades, haya conseguido
tener su propia competición es una gran noticia. El enorme poder de
comunicación y educación que genera Solar Decathlon es uno de sus grandes
valores. Estamos seguros que la competición de 2013 en China será un éxito
que redundará en beneficio de todos”.
Para Sergio Vega, Project Manager de Solar Decathlon Europe, con la decisión
de China se abren nuevos horizontes ya que “se trata de una excelente
oportunidad para seguir promoviendo la colaboración entre universidades y
empresas, lo que supone un avance en el conocimiento y en la mejora de las
condiciones de competitividad de las empresas, enriqueciendo a todos,
especialmente a los países participantes”.
Publicado por Web
EDEUROPE.ORG (03/02/11).
Capitales Chinos y Brasileños compiten por financiar proyectos energéticos
La mayor presencia de capitales chinos y brasileños en el sector energético de América Latina alienta el aprovechamiento energético de los ríos de la región como Perú, Ecuador y Nicaragua. Sin embargo, también genera severos cuestionamientos debido a los impactos sociales y ambientales de sus proyectos.
Perú
En el territorio nacional, Brasil concentró sus inversiones en hidrocarburos,
obras de infraestructura de transportes e hidroeléctricas en zonas cercanas a la
frontera común, mientras que China se volcó al sector minero.
Según la politóloga Cynthia Sanborn, ambos capitales cumplieron un papel
importante en el crecimiento económico de Perú y redujeron su dependencia
respecto a Estados Unidos, que aún no supera la crisis que estalló en 2008.
Las empresas brasileñas actúan en diversos sectores de la economía peruana, pero
no es visible la resistencia a estas inversiones de parte de la sociedad civil,
a excepción del caso de las hidroeléctricas, refiere Sanborn, experta
estadounidense que dirige el Centro de Investigación de la Universidad del
Pacífico.
Los cincos complejos hidroeléctricos que se construirán en la amazonía de Perú
están “planificados en función de los intereses brasileños”, señaló el director
de la organización ProNaturaleza, Alfredo Novoa, al portal Tierramérica.
Esos proyectos son cuestionados porque el país cuenta con generación suficiente
para su consumo eléctrico actual y puede atender su demanda futura por el
potencial de la cordillera de los Andes y los vientos costeros. Ello no conlleva
daños ambientales y sociales como sí los ocasionan las represas en la selva
amazónica.
Como Perú no necesita nuevas fuentes de la amazonía, mientras que Brasil sí, es
evidente a quién le sirven los proyectos, arguyó Novoa. Las represas y líneas de
transmisión a construir implican la deforestación de 1,5 millones de hectáreas
amazónicas, estimó el ingeniero peruano José Serra en un estudio para
ProNaturaleza.
Se condena también la financiación del Banco Nacional de Desarrollo Económico y
Social (BNDES), que condiciona la importación de equipos e insumos brasileños
para la ejecución de las obras.
Brasil usa este mecanismo para incrementar las exportaciones de gran valor
agregado, además del cobro de intereses y las ganancias de sus empresas, que
serán socias o constructoras de las centrales.
El acuerdo energético entre ambos países, firmado en junio de 2010, para la
construcción de cinco hidroeléctricas en la selva peruana, evidencia una
negociación asimétrica puesto que establece la venta a Brasil de la energía
excedente durante 30 años.
Las inversiones chinas tampoco son bien recibidas luego de que Shougang Hierro,
que explota minas en Perú desde 1992, provocó gran contaminación por derrames de
aceites y lubricantes y fue acusada de violar leyes laborales. A la vez, otras
dos empresas chinas generaron conflictos, con muertos y heridos.
Ecuador y Nicaragua
A diferencia del caso anterior, en Ecuador el tema hidroeléctrico es manejado
por las empresas chinas, que están a cargo de las tres mayores obras de ese
sector. Esta supremacía es posible gracias al financiamiento del Exim Bank
(banco de comercio exterior) de China.
Esta entidad, que cubre casi todos los costos, hizo viable esas centrales cuando
Ecuador contaba con un limitado acceso al crédito debido a la revisión de la
deuda pública que promovió el gobierno, a partir de 2007, y que llevó a no pagar
casi 4 mil millones de dólares.
Aunque Brasil financia obras mediante su estatal Banco Nacional de Desarrollo
Económico y Social (BNDES) sus inversiones fueron afectadas desde 2008, cuando
el gobierno de Rafael Correa expulsó a Odebrecht, acusándola de fallas en la
construcción de la hidroeléctrica San Francisco y reclamándole reparaciones por
210 millones de dólares.
En Nicaragua las represas hidroeléctricas están en manos de firmas brasileñas,
favorecidas por el hecho de que el país centroamericano no tiene relaciones con
China, y sí con Taiwán. En el país centroamericano, uno de los proyectos
hidroeléctricos más cuestionados fue Brito, otorgado en 2007 a la constructora
Andrade Gutiérrez.
Esta obra desató polémicas y críticas de ambientalistas, porque represará las
aguas del río San Juan para invertir su curso natural hacia el mar Caribe y
hacerlo desaguar en el océano Pacífico. Tendrá capacidad para generar 250
megavatios, a un costo inicial de 600 millones de dólares.
En casa del gigante económico
Aunque resulte irónico, en Brasil, las inversiones chinas crecieron abruptamente
en los dos últimos años, en varios sectores. En energía, se destinaron a la
compra de empresas de transmisión y distribución de electricidad, además de
otras con participación en yacimientos de petróleo.
Adriano Pires, consultor en energía y director del Centro Brasileño de
Infraestructura explicó al portal Tierramérica, que son dos tipos de
inversiones. Uno es para adquirir reservas de recursos naturales no renovables a
fin de atender la demanda en China. En tanto, el otro tipo de inversión busca
generar empleos para sus nacionales en el exterior y exportar equipos.
China es uno de los pocos países que desarrolla tecnología para ejecutar grandes
obras de infraestructura, pero difícilmente penetrará en ese sector en Brasil,
como hizo en África y Ecuador debido a las competitivas constructoras
brasileñas. Aunque sí participa en el auge de los complejos hidroeléctricos y
termoeléctricos, vendiendo turbinas y equipos a precios bajos.
Las inversiones chinas parecen “tímidas”, porque muchas no aparecen en las
estadísticas, como las que compraron el control accionario de empresas
importantes, advirtió el presidente de la Sociedad Brasileña de Estudios de
Empresas Transnacionales, Luis Alfonso Lima. Tal es el caso de la montadora
sueca de vehículos Volvo.
No obstante, su orientación no parece priorizar la energía eléctrica en Brasil.
Con casi tres billones de dólares en reservas internacionales, China trata de
transferir sus inversiones en títulos del Tesoro estadounidense a otros activos.
Publicado por Diario Servindi.org(03/02/11).