El nuevo año 2011 trae a los alemanes una nueva mezcla de gasolina con un nivel más alto de biocombustible. El Super E10 se podrá adquirir entrado el año en las gasolineras de todo el país. ¿Se elevarán los costos?

Por indicaciones del Gobierno la nueva gasolina con un 10 por ciento de biocombustible, denominada como Super E10, será introducida en las gasolineras alemanas a comienzos de 2011. Sin embargo, los conductores tendrán que esperar unas semanas más para poder adquirir este tipo de combustible. Los 14.000 tanques de gasolina no fueron adaptados antes de comienzos de año, sino que serán acondicionados “durante el primer trimestre de 2011”, dijo Klaus Picard, gerente del Gremio Alemán de la Industria Petrolera.

De acuerdo con Picard, esta introducción está “ligada a un esfuerzo considerable”. No sólo las refinerías sino también el transporte de la nueva mezcla deben ser reestructurados. Las gasolineras deberán adecuar sus listas de precios y sistemas de cajas. Además son necesarias unas señales de advertencia en los surtidores, porque no todos los vehículos toleran el Super E10.

El líder del mercado, Aral, indicó que sólo a partir de finales de enero de 2011 equipará su red de 2.500 estaciones con la nueva mezcla de bioetanol. La competencia, Shell, realizará ésto durante los primeros tres meses del año.

El nuevo combustible E10 contiene diez por ciento de bioetanol, el doble de la cantidad que tiene la gasolina Super. Este biocombustible es un alcohol que se produce a partir de plantas como la caña de azúcar, la remolacha o la colza.

Con el lanzamiento del Super E10 al mercado, el Gobierno alemán pone en práctica la norma establecida por la Unión Europea de reducir la emisión de dióxido de carbono en el sector automotriz. La Cámara Alta (Bundesrat) aprobó la introducción de este biocombustible a finales de novimebre de 2010.

El problema del E10 es que según cifras del ministerio de Ambiente, cerca de cuatro millones de vehículos no toleran esta nueva mezcla de gasolina. Si se utiliza puede perjudicar piezas metálicas en el motor o en los conductos de la gasolina. Estos automóviles deberán usar por lo menos hasta el 2013 la mezcla de gasolina que contiene cinco por ciento de bioetanol.

¿Más costoso?

Este problema también lo pueden tener los vehículos nuevos. Por este motivo es importante que los conductores se informen antes de verse perjudicados. Esta medida no afecta a las personas que tanquean con Diesel.

Lo que no es claro hasta el momento es si con la introducción del E10 también se elevarán los precios de la gasolina. El gremio de la industria petrolera alemana no se ha mencionado aún al respecto. Lo que sí puede ser factible es que el nuevo biocombustible sea más costoso que la gasolina Super que se encuentra en el mercado. Ésto debido a que el etanol es más costoso que la gasolina. También puede ser posible que los consorcios petroleros subvencionen el precio del E10 elevando el precio del Super regular.

Ante la duda, el Gremio Alemán de la Industria de Biocombustibles se muestra confiado en que no se eleven los precios. “El Gremio de la Industria Petrolera también tiene interés en vender el E10, ya que está obligada normativamente a introducir biocombustibles en el mercado”, dice Claus Sauter, presidente del gremio de biocombustibles.

Desventajas

Lo que sí es seguro es que son los conductores los que pagarán la cuenta al final. Tanquear será más costoso debido a que el gremio petrolero debe invertir millones de euros en la adaptación de los nuevos tanques y surtidores, además de la logística que implica el proceso de mezcla del nuevo combustible en las rafinerías. Por último, los consorcios deben adquirir el etanol, que es más costoso que la gasolina, en el mercado internacional.

La desventaja del etanol es que tiene un menor contenido energético que la gasolina convencional. Debido a ésto el consumo de esta nueva mezcla en comparación con la anterior aumenta en promedio un tres por ciento. “Lo bio no es tan barato”, dice Detlef Brandenburg, portavoz de la firma Aral.

¿Mejor otros métodos?


Para los ecologistas, el uso de biocombustibles es controversial. Algunos grupos critican que en los países emergentes los cultivos destinados a la producción de biocombustibles compiten con los destinados para alimentos. Esto conlleva a mayores hambrunas.

La Sociedad Alemana de Conservación de la Naturaleza y la Biodiversidad (NABU por sus siglas en alemán) dice también que existen otros instrumentos mejores para reducir el cambio climático. En vez de talar bosques para el cultivo de estas plantas, sería más sensato producir vehículos que ahorren combustible, así como nuevas tecnologías libres de CO2.