Dan un paso más para lograr la cría en cautividad del atún rojo
Investigadores del Centro Oceanográfico de Murcia
del Instituto Español de Oceanografía (IEO) han
logrado trasladar con éxito a unos 60 juveniles de
atún rojo nacidos en cautividad hace 50 días hasta
unas jaulas de engorde instaladas mar adentro.
Los pasados días 20 y 21 de agosto, científicos del
Instituto Español de Oceanografía (IEO) trasladaron
con éxito unos 60 atunes rojos criados en cautividad
desde los laboratorios de San Pedro del Pinatar
(Murcia) hasta unas jaulas del Grupo Fuentes,
ubicadas en la bahía del Gorguel en Cartagena.
Los atunes, con 50 días de vida y un peso medio
cercano a los 20 gramos, nacieron el pasado 25 de
junio en las instalaciones del Centro Oceanográfico
de Murcia del IEO en el marco del proyecto SELFDOTT
(From capture based to SELF-sustained aquaculture
and Domestication Of bluefin tuna, Thunnus Thynnus),
en el que intervienen 13 instituciones de diferentes
países y que está financiado por el VII Programa
Marco de la Unión Europea.
El equipo de investigadores del IEO compuesto por
Aurelio Ortega y Fernando de la Gándara, con la
colaboración del técnico Javier Viguri, han
conseguido finalmente llevar los primeros alevines
de atún rojo a las instalaciones de jaulas tras un
transporte en camión y barco de más de dos horas de
duración. A pesar de que la mortalidad ha sido
elevada, los juveniles supervivientes están bien y
se alimentan con normalidad.
Publicado por Web Ambientum (31/08/10).
Logran recuperar la rana ibérica en Peñalara tras su desaparición en los años 70
Se ha logrado con éxito la cría en cautividad
de un millar de ejemplares de rana ibérica, una especie en peligro de extinción,
a la vez que se ha conseguido extinguir de la zona al salvelino, el pez que
impedía la presencia de este anfibio autóctono de la Sierra de Guadarrama.
La Comunidad de Madrid ha logrado la recuperación de la rana ibérica en Peñalara
tras décadas de ausencia en esta zona de la Sierra de Guadarrama. El motivo de
su desaparición fue la presencia de ciertas especies silvestres que se
introdujeron en los años setenta para fomentar el deporte de la pesca, una
situación que la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del
Territorio ha logrado corregir a través de un laborioso trabajo.
El director general de Medio Ambiente, Federico Ramos, soltó 200 ejemplares de
estos anfibios en la zona de las Lagunas del Parque Natural de Peñalara, en
pleno corazón de la Sierra de Guadarrama. "La rana ibérica es uno de los
bioindicadores más fiables de la calidad medioambiental que reúne la sierra
madrileña", declaró Ramos. Se trata de una especie muy exigente con la calidad
del medio en el que se desarrolla, por lo que su presencia garantiza el buen
estado de esta zona de la sierra madrileña. Así, Guadarrama cuenta con una
riqueza faunística que reúne a 1.280 especies de fauna.
Los ejemplares introducidos han sido criados en el Centro de Cría en Cautividad
de Anfibios Amenazados ubicado en Rascafría y con ellos son ya unos mil los
ejemplares de esta misma especie que el Ejecutivo regional ha soltado en esta
zona de Madrid con el objetivo de recuperar a un anfibio que en la década de los
70 desapareció debido a ciertas enfermedades ya eliminadas y, sobre todo, a la
presencia de especies alóctonas introducidas por el hombre para la práctica de
la pesca.
Éxito en la recuperación de especies
Conseguir la recuperación de una especie que ha desaparecido de una determinada
zona es un hito medioambiental que supone un trabajo muy laborioso. El éxito de
la recuperación de la rana ibérica en Peñalara es fruto de los trabajos que
comenzaron en 2005 cuando fueron introducidos los primeros ejemplares en
distintas zonas del parque: la Hoya de Pepe Hernando y la Hoya de Peñalara.
Lo primero que se hizo fue un estudio del terreno que determinó la presencia de
especies alóctonas que desplazaban a la rana ibérica. En este caso, el problema
era la presencia del salvelino, un pez de la familia de los salmónidos, que
había colonizado gracias a las introducciones que se hicieron para la práctica
de la pesca en Peñalara en los años 70. Para la captura de estos ejemplares se
ha utilizado la técnica de la pesca eléctrica, un método muy poco invasor, que
no altera el medio y que consiste en adormecer al salvelino para poder retirarlo
con mayor facilidad.
Una vez desaparecido este salmónido, y tras eliminarse la práctica de la pesca
de esta zona del Parque, se procedió a la suelta de ejemplares de rana ibérica
en distintas épocas, habiéndose alcanzado los 1.000 ejemplares con la suelta que
efectuada la semana pasada. Además, los trabajos incluyen el seguimiento de los
anfibios a través de los equipos de grabación automática de cantos ("frogloggers")
instalados en los humedales. Además, se realizan muestreos nocturnos periódicos
de adultos y, muestreos diurnos de larvas para analizar los éxitos de las
reintroducciones.
Publicado por Web Ambientum (03/08/10).