De acuerdo con el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi), entre el 1 de abril a la fecha, el Lago Titicaca perdió 44 centímetros del nivel de agua (altura) debido a la ausencia de lluvias.
"Durante la temporada de lluvias, en abril, principalmente suele incrementarse el nivel de agua porque los ríos alimentan al Titicaca. Ahora, a consecuencias de la temporada seca, los ríos están bajos en sus caudales y el nivel del referido lago se pierde por evaporación, entonces la superficie de este espacio va reduciéndose en su área y altura correspondiente al nivel del mar", indicó a Gestión, Sixto Flores, jefe regional de Senamhi en Puno.
El especialista explicó que, en 1996, el nivel del lago Titicaca decreció a 3,808.10 metros sobre el nivel del mar. "La cifra actual es de 3,808.28. Estamos a 18 centímetros en altura de alcanzar lo reportado el 5 de diciembre de 1996. Entonces, suele perderse un promedio de 35 centímetros (por evaporación) de agosto a noviembre e incluso diciembre, con las cifras actuales podría superarse el nivel de pérdida alcanzado en el mencionado año".
Impacto en sectores
El presidente de la Cámara de Comercio de Puno, Francisco Aquise, mencionó a Gestión que, ante el panorama de sequía en la región del altiplano, miembros de familias han migrado hacia otras regiones por un tema de demanda laboral para dedicarse a otras actividades, y entre los destinos figuras Tacna, Moquegua, Cusco, Arequipa y Lima.
De igual manera, otros grupos afectados son los que se dedican a la agricultura y a la ganadería que vienen sobreviviendo, ejecutando alternativas en su cosecha debido a la falta de agua, dijo Awuise. "En el cultivo de quinua se ha perdido casi el 90% de cosecha, y el de tubérculos casi el 80%.
Entonces, la escasez de alimentos entre setiembre y octubre será mayor. Además, también faltarán las semillas.
Ahora con esta crisis hídrica, no se sabe si tendrán interés en cultivar".
En cuanto a la actividad turística en el Lago Titicaca, Aquise señaló que las islas flotantes como la de Uros podrían cambiar de ubicación.
"Las islas tienen una base flotante que es el quile y por eso se pueden mover. Antes las islas estaban lejos de la ciudad de Puno, a una hora y media aproximadamente, y tras la inundación en 1986 por exceso de nivel se trasladaron cerca de la ciudad. Entonces en esta temporada se puede mover a otros sectores, teniendo un costo", remarcó.
Sobre el rubro de hotelería, Puno ya reporta el funcionamiento de todos sus hospedajes desde agosto, mientras los operadores turísticos están retomando sus actividades de acuerdo con el flujo de turistas que van llegando a la región.
"Tenemos un incremento de visitantes nacionales. Estimamos una recuperación del 25% en el turismo receptivo", dijo el representante gremial.
De otro lado, indicó que la recuperación de las actividades comerciales y de turismo de la región viene de forma lenta. En esta línea, pidió al Ejecutivo que se levante el estado de emergencia en la región. Comentó que a la fecha solo hay presencia de policías y los militares se retiraron a fines de julio.
Fuente: Gestión - pag.16, 21 de agosto del 2023.