Hace algunas semanas se estrenó en la plataforma de Disney+ la serie de uno de los personajes más queridos por la población, Loki. La trama gira en torno a una sagrada línea del tiempo, los guardianes de aquella línea, frente a las variantes y sus eventos Nexus.

En términos sencillos, toda la historia ya está definida y el evento Nexus se da cuando una variante realiza, o no, algo que puede afectar aquel destino. Creo que, como vamos, nuestra línea del tiempo en materia ambiental ya está definida, y el final no creo que sea del agrado de todos.

Ahora, la aparición del covid-19 parecía aquel evento Nexus que podía alterar –para bien– nuestro trágico final. Lamentablemente, no ha sido así. Ello ha sido ahora recalcado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).

Hace algunos días, la Cepal publicó su informe especial ‘Covid-19, la paradoja de la recuperación en América Latina y el Caribe’. Crecimiento con persistentes problemas estructurales: desigualdad, pobreza, poca inversión y baja productividad, que recoge información que resulta importante comentarle al lector y lectora, claro está, con la correspondiente invitación a revisar este informe.

Se señala que, si bien las cuarentenas y los cierres de establecimientos comerciales produjeron como contrapartida mejoras locales de la calidad del aire y la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, estas fueron temporales y se disiparon al retomarse las actividades económicas.

También señala que el covid-19 ha empeorado el estado ambiental por la caída en los presupuestos del sector. Agrega que el presupuesto o gasto en protección ambiental en América Latina y el Caribe ha experimentado, en promedio, un descenso constante en los últimos años.

El Estado adopta medidas para llevar a cabo la reactivación económica, la cual siempre he considerado que no se debería realizar desconociendo o sacrificando derechos de las personas, y, en particular, los de grupos vulnerables, como los pueblos indígenas. Debo ser consciente que esta reactivación también se traducirá en ingresos para el Estado y desarrollo de sus funciones, dentro de estas, la de supervisión ambiental de las actividades.

Ahora, respecto a la reactivación económica, Cepal precisa que esos paquetes de estímulo siguen siendo una oportunidad para alentar las inversiones en sectores con bajas emisiones de carbono. Toda vez que la reducción de las emisiones por la aparición del covid-19 fue menor de lo necesario para cumplir con los objetivos climáticos del Acuerdo de París.

Entonces, la aparición del covid-19 no era el evento Nexus que nos salvaría de nuestro trágico fin, vemos que la sagrada línea del tiempo ya se ajustó. Por eso, corresponde a cada uno de nosotros fungir de variantes y luchar por cambiar nuestro destino.

Fuente: El Peruano.