AUTOR: Jhon Leigh Vetter
Es de interés nacional la investigación científica, el desarrollo tecnológico, la mejora del conocimiento y el monitoreo del estado de conservación de nuestro patrimonio natural. Por ello, el Estado, mediante la Ley Forestal y de Fauna Silvestre y sus reglamentos, ha reformulado y dinamizado el procedimiento para acceder a la autorización de la investigación científica de flora y/o fauna silvestre. Estos incluyen diversos mecanismos de promoción, como son la gratuidad del procedimiento de autorización, la estandarización de formatos y la disminución de requisitos.
Se han descentralizado los procedimientos, las autoridades regionales (ARFFS), al igual que el Serfor, también otorgan autorizaciones de investigación, de acuerdo con las competencias transferidas.
Las instituciones académicas nacionales han sido fortalecidas al solicitarse la obligatoriedad de contar con participantes nacionales en proyectos presentados por investigadores extranjeros. Aunque a nivel administrativo todavía se tiene una brecha por cubrir, relacionada con los plazos de atención, generada por los escasos recursos con los que cuentan las instituciones encargadas.
Se ha podido observar que desde la entrada en vigencia de la actual normativa, en octubre del 2015, las autorizaciones otorgadas en el país se han incrementado en 50%. En el 2015 fueron 116; en el 2016, 148; y en el 2017, 222. Esto constituye una señal del acercamiento de la academia y otras entidades de investigación con el Estado peruano, al que recurren ante la necesidad de dar legalidad a las investigaciones que desarrollan.
De las autorizaciones otorgadas por el Serfor desde el 2016 hasta setiembre del 2018, el 73% proviene de investigadores nacionales, mientras que el 27% procede de investigadores extranjeros.
Las investigaciones se realizan sobre el patrimonio forestal y de fauna silvestre, e incluyen aquellas que se desarrollan en títulos habilitantes como, por ejemplo, las concesiones forestales, las cuales proveen de información valiosa sobre las bondades de nuestros recursos madereros, no maderables y fauna, entre otros. Todo ello permite la conservación de la naturaleza y el manejo sostenible de los recursos naturales.
El rol de los investigadores e instituciones académicas en la sociedad es sumamente importante porque ellos generan nuevos conocimientos, necesarios y útiles para la gestión, el manejo, el uso sostenible y la conservación de los recursos naturales.
Por eso, se ha iniciado la asistencia técnica a las ARFFS y a la comunidad científica en los departamentos de Cusco, Huánuco, Puno, Áncash, Apurímac, Cajamarca, Tacna, Moquegua y Tumbes. Recordemos que la administración y gestión de los recursos naturales están a cargo del Estado, que es responsable de generar las condiciones para incentivar la investigación y tomar las mejores decisiones hacia el futuro. En ese camino estamos.
Publicado por: El Peruano, 01 de noviembre del 2018
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