El gas de dióxido de carbono que atrapa el calor emitido cuando se queman los biocombustibles no es totalmente equilibrado por la absorción de CO2 que se produce a medida que crecen las plantas, según concluye el trabajo dirigido por John DeCicco, del Instituto de Energía de la Universidad de Michigan.
El estudio, basado en datos del Departamento de Agricultura de Estados Unidos, muestra que durante el período en que la producción de biocombustibles de Estados Unidos se intensificó rápidamente, la absorción de dióxido de carbono de las cosechas era solamente suficiente para compensar el 37 por ciento de las emisiones de CO2 debidas a la combustión de biocombustibles.
Los investigadores concluyen que el uso creciente de biocombustibles se asocia con un aumento neto --más que con una disminución, como muchos reivindican-- en la emisión de dióxido de carbono que causa el calentamiento global. Los resultados han sido publicados en Climatic Change.
"Este es el primer estudio que examina con cuidado el carbono emitido en tierras donde se cultivan los biocombustibles, en lugar de hacer suposiciones acerca de ello", ha afirmado DeCicco.
"Cuando nos fijamos en lo que está sucediendo realmente en la tierra, se encuentra que no hay suficiente carbono que se elimina de la atmósfera para equilibrar lo que sale del tubo de escape.", según un comunicado de la Universidad de Michigan.
El uso de biocombustibles para desplazar el petróleo se ha expandido en la última década en Estados Unidos en respuesta a las políticas que promueven su uso para el transporte. El consumo de biocombustibles líquidos - etanol y biodiesel principalmente de maíz - se ha triplicado en Estados Unidos entre 2004 y 2013.
En lugar de modelar la emisión, DeCicco y sus colegas analizaron los datos reales de la producción de cultivos, producción de biocombustibles, producción de combustibles fósiles y emisiones de vehículos, sin suponer que los biocombustibles son neutros en carbono. Su trabajo empírico dio una conclusión sorprendente.
"Cuando se trata de la emisión que causa el calentamiento global, resulta que los biocombustibles son peores que la gasolina --ha añadido DeCicco-- Así que las bases de las políticas utilizadas para promover los biocombustibles por razones de clima, ahora han demostrado ser incorrectas científicamente".
Fuente: ECOSITIO (30 de agosto del 2016)