Facebook y Twitter libran una batalla por las fotos en la web
Por EVELYN M. RUSLI y SHIRA OVIDE
La lucha entre Facebook y Twitter para convertirse en el destino obligado para compartir fotos en Internet empieza a escalar.
Instagram, que está en manos de Facebook Inc., desató el martes una tormenta en Internet al divulgar los nuevos términos para usar su servicio para compartir fotos. Luego de recibir durante horas las airadas reacciones de sus clientes, Instagram aclaró que no venderá, como temían los usuarios, fotos ni las usará para fines publicitarios.
Las nuevas condiciones, sin embargo, reflejan un cambio más profundo en Facebook y en la comercialización de las redes sociales. Facebook trata de exprimir más ganancias de Instagram, que no registraba ingresos cuando acordó comprarla en abril por alrededor de US$1.000 millones.
Las escaramuzas con Twitter Inc., que en su momento fue el lugar más importante para compartir las fotos estilizadas de Instagram en línea, son parte de esa estrategia.
Las dos empresas han tenido varios conflictos en los últimos meses relacionados a su tecnología, estrategia y, últimamente, la competencia por captar publicidad móvil.
La semana pasada, Instagram deshabilitó una función que permitía a sus usuarios publicar fotos directamente en Twitter e indicó que prefería que sus miembros usen sus propios servicios en línea. Twitter contraatacó rápidamente al anunciar nuevos "filtros" de imágenes digitales para sus propias funciones para publicar fotos. Los filtros, que son parecidos a los de Instagram, permiten a la gente tomar retratos con teléfonos inteligentes y convertirlos en fotos con estilo cinematográfico o en blanco y negro.
Instagram no ha demorado en transformarse en una amenaza formidable para Twitter. El servicio alcanzó 7,3 millones de usuarios activos diarios en agosto y superó por primera vez a Twitter a los 6,87 millones de usuarios activos de Twitter, según comScore.
Desde entonces, la brecha se ha ampliado. Instagram registró 17% más de usuarios activos diarios que Twitter el mes pasado, indicó comScore. Los usuarios pasaron en promedio 321 minutos en Instagram en noviembre, comparado con 146 minutos en Twitter, según comScore.
Twitter anunció esta semana que más de 200 millones de personas se conectan al servicio al menos una vez al mes. Aunque Instagram no revela sus usuarios activos mensuales, Facebook sostuvo que Instagram tiene más de 100 millones de usuarios registrados.
Voceros de Facebook y Twitter prefirieron no hacer comentarios sobre la relación entre las dos compañías.
La relación entre Instagram y Twitter comenzó a deteriorarse después de que Facebook anunciara la compra del servicio fotográfico en abril. Twitter, cuyo cofundador Jack Dorsey fue uno de los primeros inversionistas de Instagram, también había intentado comprar la empresa, indicaron fuentes al tanto.
Ahora, Twitter e Instagram, que son plataformas usadas principalmente en aparatos móviles, probablemente intenten conquistar a los mismos anunciantes.
No queda claro cómo lucirán los avisos en Instagram. El presidente ejecutivo, Kevin Systrom, señaló en el blog de la compañía que pretendía seguir experimentando con productos publicitarios, pero indicó que un tipo de anuncio podría promocionar las cuentas de marcas que siguen los amigos de un usuario.
Este tipo de publicidad sería similar a las Cuentas Promocionadas de Twitter, que aparecen en todo el sitio y alientan a los usuarios a seguir marcas relevantes. Un sitio web de noticias financieras, por ejemplo, puede comprar un aviso en Twitter que sugiere usuarios con gustos parecidos, como personas que siguen las cuentas de Twitter de bancos o ejecutivos de finanzas, para seguir la cuenta de esa página de Internet. Twitter también vende "tuits promocionados", por los que los anunciantes pagan con la intención de llegar a amplios grupos de usuarios.
Aunque no es de extrañar que Instagram esté sentando las bases de un negocio rentable, sus ambiciones la hacen correr el riesgo de irritar a sus seguidores, que no escondieron su disgusto esta semana cuando la compañía anunció sus nuevos términos de uso y la obligaron a modificarlos.
Publicado en The Wall Street Journal el 21 de diciembre del 2012