COMPRAR Y GESTIONAR UN NOMBRE DE DOMINIO
Por Antonio Delgado
Cada página web es distinta de otra, como lo es su creador respecto a los demás.
Los sitios de Internet son un reflejo de las personas que hay detrás y deben
poder identificarse con las mismas y facilitar que los demás los identifiquen.
Tener un nombre de dominio en Internet, por lo tanto, es una ventaja para muchos
usuarios, al poder asociarlo a una página web personal o a una cuenta de correo
electrónico. Sin embargo, es necesario tener en cuenta una serie de
recomendaciones para registrar y gestionar un nombre de dominio de forma segura.
Niveles de dominio
Los nombres de dominio son las direcciones de Internet que permiten acceder a un
sitio web al teclearlo en el navegador. Detrás de ellos se encuentran las DNS
(Domain Name System), que se asemejan a un sistema de correspondencias numéricas,
a modo de identificadores de dominios. Este sistema consiste en una base de
datos distribuida cuyo cometido es el de recopilar las direcciones IP de cada
servidor web y asignarles un nombre de dominio. Es decir, cuando un usuario
escribe "www.consumer.es", los servidores DNS se encargan de apuntar hacia la IP
del servidor 67.215.65.132. De esta forma, los usuarios pueden recordar de forma
más sencilla una dirección de Internet.
Los nombres de dominios tienen diferentes tipos de extensiones, en función del
tipo de contenido que alojan o del país al que refieren. Los dominios terminados
en ".com", ".net" y ".org" se llaman dominios genéricos de primer nivel y son
los más utilizados. En particular, los ".com". En un principio, estas
extensiones se crearon para actividades específicas del tipo comercial o bien
proyectos en red y sin ánimo de lucro, pero ahora se utilizan para cualquier
tipo de proyecto, debido a la escasez de los mismos.
Estas extensiones se crearon para actividades específicas del tipo comercial o
bien proyectos en red y sin ánimo de lucro, pero ahora se utilizan para
cualquier tipo de proyecto
En un segundo nivel destacan los dominios territoriales como ".es" para España,
".fr" en Francia o ".pt" para Portugal. Estos dominios son interesantes para
entidades y empresas locales y cada uno de ellos está gestionado por un
organismo local. En España, los dominios ".es" los gestiona la entidad pública
Red.es a través de ESNIC. Estos organismos son los encargados de acreditar a los
agentes registradores, es decir, a las compañías donde los usuarios y las
empresas pueden acudir para tramitar la compra o renovación de un nombre de
dominio.
Cada uno de los organismos locales encargados de la gestión de los nombres de
dominios de un país establece las condiciones de acceso y tarifas de los mismos.
En España, durante muchos años, los dominios ".es" no tenían una gran aceptación
debido a su elevado precio respecto a dominios genéricos de primer nivel y a las
condiciones impuestas en su tramitación. Sin embargo, después de realizarse una
simplificación de trámites y la subsiguiente bajada de precios, el pasado verano
los dominios ".es" alcanzaron la cifra de un millón de dominios registrados.
En un tercer nivel, se engloban los dominios del tipo ".com.es" o ".nom.es".
Estos dominios tienen la ventaja de tener un precio más económico, por lo que
son una opción recomendable para usuarios particulares que necesiten tener un
nombre en Internet.
Elegir un nombre de dominio
En el momento de registrar un nombre de dominio, elegir la palabra o combinación
de estas es la primera acción que deben realizar los usuarios. Sin embargo, las
principales palabras en los idiomas más extendidos en el mundo están registradas
desde hace años. La falta de palabras o buenas combinaciones es uno de los
problemas al registrar un dominio. Así se puede ver con los dominios ".com",
donde todas las combinaciones posibles de tres letras están registradas desde
hace años. Existe, sin embargo, un mercado de compraventa de dominios donde los
usuarios y empresas pueden acudir a adquirir al precio estipulado por sus dueños
de dominios ya registrados. Uno de los sitios más conocidos es Sedo.com.
Las principales palabras en los idiomas más extendidos en el mundo están
registradas desde hace años y la falta de buenas combinaciones es uno de los
problemas al registrar un dominio
Esta actividad, en ocasiones especulativa, se basa en registrar palabras
relacionadas con diferentes sectores, como el ocio, el turismo o el juego, que
pueden ser de especial relevancia al crear una actividad empresarial en
Internet. Las más demandadas son las palabras genéricas, como nombres y
adjetivos relacionados con una actividad concreta, ya que son los primeros que
los internautas usan en los buscadores.
Debido a la falta de nombres de dominios en las extensiones más utilizadas y
para fomentar la creación de dominios personalizados, ICAAN, el organismo
encargado del control de los nombres de dominios, ha liberalizado su uso. A
partir de 2010, las compañías e instituciones que cumplan una serie de
requisitos podrán solicitar la creación de extensiones de dominios asociadas a
sus marcas. De esta forma, empresas como Google o Apple, podrían tener, si así
lo decidieran, extensiones como ".google" o ".apple".
Registrar el dominio
La recomendación principal es ir directamente a la web de un agente registrador
de confianza para buscar nombres de dominios libres y proceder a su registro.
Estas empresas no solo ofrecen el servicio de registro de dominios, sino que
también disponen de planes de alojamiento, cuentas de correo asociadas, etc.
Para los dominios ".es", ESNIC dispone de un listado de agentes registradores
donde acudir. También existen servicios on line que facilitan la comprobación de
nombres en diferentes extensiones de dominios mientras se teclea, como la web
Instant Domain Search.
Cuando se registra un nombre de dominio, este debe renovarse mediante el pago de
una cuota, de forma periódica
Cuando se registra un nombre de dominio, este debe renovarse mediante el pago de
una cuota, de forma periódica. El periodo mínimo es de un año, aunque se pueden
renovar por más años. La renovación se suele realizar entre 60 y 30 días antes
de la fecha de finalización del contrato. Con frecuencia, las empresas
registradoras envían un correo electrónico automatizado de aviso, pero es
recomendable apuntar la fecha en un calendario por si esto no sucediera.
Para registrar un nombre es importante leer la letra pequeña de estos servicios,
ya que en el pasado se acusó a algunos registradores de contemplar de manera
automática los nombres de dominios libres que buscaban en sus sistemas los
usuarios que no terminaban el proceso de registro con ellos.
Otras recomendaciones
El titular del nombre es el que aparezca como dueño en los datos del dominio.
Por este motivo, es imprescindible que estos datos sean los del usuario o
empresa, ya que en caso de conflicto, un dominio registrado con nombre falso
puede cancelarse con facilidad.
Es imprescindible que los datos sean los del usuario, ya que en caso de
conflicto, un dominio registrado con nombre falso puede cancelarse con facilidad
Es recomendable que el agente registrador disponga de una plataforma on line
para la gestión del dominio. De esta manera, los usuarios pueden actualizar o
modificar los datos del mismo sin necesidad de que estos trámites los realice
solo el registrador. Además, la atención al cliente es otro de los aspectos que
se debe tener en cuenta. No es lo mismo contactar con una empresa establecida en
el mismo país del usuario que con otra ubicada en un horario e idioma diferente.
Los precios de los nombres de dominios varían de un registrador a otro, que
suelen utilizar ofertas agresivas, e incluso, ofrecer dominios de forma gratuita.
Sin embargo, estas ofertas incluyen gastos no visibles, a priori asociados a la
compra, y hasta un precio muy superior al de la competencia en el momento de
renovarlo. También se han dado casos, en ofertas gratuitas de registro, donde el
titular del dominio registrado por el usuario es la propia empresa registradora.
Fuente: www.elpais.com