YOIGO Y ORANGE ARREBATAN CIENTOS
DE MILES DE CLIENTES A LOS GRANDES
Por Ramón Muñoz
La crisis agudiza el sexto sentido del consumidor para el ahorro. En la
telefonía móvil se traduce en la búsqueda de los mejores planes de precios de
las distintas operadoras, aun a costa de cambiar de compañía. Estas se roban los
clientes entre sí ofreciéndoles ofertas o terminales. En 2010, ese fenómeno se
ha extremado y casi cinco millones de abonados se han pasado a otra operadora
gracias al mecanismo de la portabilidad, que permite irse a otra compañía gratis
pero conservando el número de teléfono.
Vodafone y Movistar perdieron unas 800.000 líneas el año pasado
En diciembre se superó el medio millón de portabilidades
Y en esa batalla, los operadores más pequeños han ganado con gran holgura a los
grandes. Yoigo y Orange, cuarto y tercer operador respectivamente, han
arrebatado clientes masivamente a Vodafone y a Movistar. Así, Yoigo ha
conseguido en el conjunto de 2010 un saldo neto (clientes ganados menos clientes
perdidos) de 473.836 líneas, mientras que Orange se hacía con 243.239. Por el
contrario, Vodafone es el gran perdedor, con un saldo neto negativo de 579.567,
más del doble que el de Movistar, que ha perdido 220.977.
Otros operadores alternativos, los llamados OMV u operadores móviles virtuales
(como Simyo, Carrefour Móvil, Happy Móvil, MasMóvil, PepePhone y otros) también
ganaron terreno, con un saldo neto positivo de 83.469 clientes en 2010, según
las cifras facilitadas por los operadores a la Comisión del Mercado de
Telecomunicaciones (CMT) a las que ha tenido acceso este diario.
Aunque son cifras provisionales -las últimas oficiales son las de noviembre, que
la CMT facilitó el miércoles-, se trata de un verdadero vuelco en un sector con
una competencia feroz por los más de 54 millones de líneas con las que acabó
2010. Baste decir que solo en el mes de diciembre pasado se batieron todos los
récord de portabilidad con más de medio millón de clientes (508.456) que
cambiaron de compañía.
El mes de diciembre suele ser el más movido en el mercado de la telefonía móvil
con motivo de las navidades y las agresivas campañas de captación de nuevos
clientes, mediante oferta de tarifas y, sobre todo, regalo de terminales
asociados a contratos de permanencia de entre 18 y 24 meses.
Con un mercado completamente saturado -hay más líneas móviles que población-, la
batalla de la portabilidad es ahora mismo la principal vía de adquisición de
abonados, superando de lejos a las nuevas altas. De esa encarnizada competencia
da cuenta de que en 2010 hubo 4,857 millones de portabilidades, un 7% más que en
2009. Y es que la recesión económica ha hecho que más de nueve millones de
abonados hayan cambiado de operadora en los dos últimos años. Orange y los
operadores alternativos a Movistar y Vodafone han salido ganando gracias a
tarifas competitivas, en general promediando precios a través de tipos de
tráfico.
Cuando lo que manda es el precio, la fidelización del cliente se complica.
Además, la Ley General de Telecomunicaciones aprobada el pasado diciembre por el
Gobierno pone las cosas más fáciles a quien quiera abandonar una empresa y
probar los servicios de otra, ya que los clientes de las compañías de teléfono
tanto móvil como fijo y de acceso a Internet podrán cambiar de compañía
conservando el número, por el mecanismo de la portabilidad, en 24 horas.
La demanda en el sector de las telecomunicaciones no cesa. Según los últimos
datos públicos de la CMT, la banda ancha no sabe de crisis. En noviembre se
contrataron 71.840 nuevas líneas de conexión a Internet, lo que supone un
incremento del 8,5% respecto al mismo mes del año anterior. Se han alcanzado
10,5 millones de líneas.
Fuente: www.elpais.com