EL 80% DE NUESTRAS COMPRAS DEPENDE DE LAS EMOCIONES

Las decisiones racionales pasaron de moda, ahora se deberá apuntar a los sentimientos del consumido para forjar lazos estrechos con la marca, señala Philip Kotler

 

 

Desde que se dio paso a la apertura de mercados, hemos sido testigos de la progresiva transformación de los consumidores hacia un cliente cada vez mas informado, sofisticado e involucrado activamente en las marcas.

Pero pese a la gran explotación de nuevas y renovadas alternativas en el mercado, el consumidor de hoy ha dejado de lado, en gran parte, sus decisiones racionales.

El reconocido gurú del marketing, Philip Kotler afirma que actualmente el 80% de las compras que realizamos depende de nuestras emociones y no de patrones que apelen a la razón.

Por ello ahora el objetivo de marketing de toda empresa, debe apuntar no solo a la mente, sino al corazón e incluso al espíritu del consumidor, ya que sus lazos con la marca suelen ser cada vez mas estrechos, destacó.

“La marca debe generar un momento con el consumidor y esto se da solo a través de la experiencia de consumo”, anotó durante el seminario “Winning through Brand Building and Differentiation”, organizado por la Escuela de Postgrado de la Universidad del Pacifico.

Precisó que la gestión de la calidad total ha desterrado del mercado los productos y servicios malos, de allí de la necesidad de una diferenciación emocional o de significado.

 

 

 

Marcas Sólidas

Señaló que la solidez de una marca depende de los beneficios del producto, pero no es suficiente forjar solamente una identidad definida, ya que se tendrán que añadir beneficios emocionales para distinguirla de otra.

“Las marcas sólidas no solo venden, sino también dan valor de uso y de compra”, manifestó.

Estos valores de uso y de compra-detallo- se pueden identificar como el curso gratuito de fotografía al adquirir una cámara Kodak, por ejemplo, entre otros.

 

No obstante, mencionó que aun existen compañías sumamente orientadas a la venta de productos y no a ofrecer servicios, lo cual las hace débiles frente a la competencia y no muy sostenible en el tiempo.

“La marca es una herramienta de gestión, que debe incluir a todos los agentes involucrados, puesto que no tiene sentido hacer una marca sólida, si los trabajadores no se identifican con la misma”, anotó.

En general una marca sólida mejora la demanda (generando mayor volumen de venta, reduciendo la tasa de abandono y deserción) y la oferta con menores costo de capital y de adquisición, mejores economías de escala y términos mas favorables para el proveedor.

Muchas veces una marca puede ser desconocida, pero se le puede dar valor al producto, a través de la utilización de un componente que si  sea reconocido y tenga un posicionamiento relevante en el mercado.

 

Reputación corporativa  

¿Qué hace que la reputación de una compañía sea mas sólida?, pues en este punto la calidad del producto y del servicio será fundamental, sostiene Kotler. En segundo lugar están los resultados financieros, de ahí la capacidad de la empresa para responder ante cualquier eventualidad.

El liderazgo del representante de la empresa también será importante, e incluso en algunos casos la relevancia del presidente o gerente general llega a sobrepasar a la empresa, generándose un riesgo para la misma, por lo que se deberá cuidar este detalle.

 

 

Fuente: Gestión