TARJETAS POR EFECTIVO
Una tendencia que se consolida en el país.
Finanzas. El uso de los plásticos crece a dos dígitos año tras año y poco a poco va ganando terreno frente al 'cash'. Este 2018ha movido más de S/76 millones.
Para tener una idea sobre cómo y cuánto ha crecido el uso de las tarjetas de crédito y débito en el mercado peruano, solo hace falta calcular qué porcentaje de nuestros consumos cotidianos pagamos ahora con nuestros plásticos o con las aplicaciones vinculadas a ellos.
En la lista pueden aparecer ocasiones de compra como ir al supermercado, al cine, a un 'after office' o suscribirnos a aplicaciones de taxi o streaming. Hoy los plásticos han empezado a convertirse en moneda corriente -aunque no haya moneda física de por medio, esta vez- y es destacable si reparamos que, hace apenas tres años, la situación era muy distinta.
Christophe Robilliard, country manager de Easy Taxi en nuestro país, apunta que -en efecto- el avance ha sido exponencial. "Cuando en el 2015, incorporamos la opción de pago por tarjeta, solo el 3% de nuestros usuarios la aprovechaba. Hoy, el 35% de nuestros viaje se paga con plásticos", destaca a Día1. Y añade que para el cierre de este año apuntan a que la mitad de sus viajes se facture así. Un acelerado adiós al efectivo, del que han tomado nota, sin dudar, sus más de 30 mil conductores pues todos han integrado esta alternativa de pago a sus servicios.
Así como Easy Taxi, hay más empresas de servicios que han empezado a ofrecer promociones a los usuarios para que paguen con sus tarjetas. Javier Álvarez, director de Estudios Multicines de Ipsos Perú, comenta que compañías de TV paga aseguradoras, bancos de células madre, Netflix, Spotify y otras firmas de servicios han optado por los pagos con cargo en cuenta de la tarjeta por la búsqueda de automatizar el proceso y cautivar a los clientes.
"La estrategia del cargo en cuenta o la inscripción de la tarjeta a aplicativos es una realidad. Por algunas circustancias, el hábito de usar algunos servicios está llevando a las personas a usar plataformas de pago modernas", refiere.
Usar medios de pago distintos al efectivo trae beneficios a ambas parte de una transacción: los vendedores evitan la morosidad de los usuarios, mientras que los compradores acceden a una experiencia de pago más rápida y segura.
"Es más conveniente para las personas pagar el taxi con una tarjeta a que el taxista tenga que desviarse a un grifo para cambiar sencillo". Aquí hay una ganancia, tanto para el usuario como para el sistema financiero por los altos costos y riesgos que demanda transportar efectivo", sostiene José Antonio Muñiz, gerente de Área de Medios de Pago y Financiamiento al Consumo del Banco de Crédito (BCP).
En los tres primeros meses del año, el momento promedio mensual de pagos con tarjetas de débito creció en 21% frente a similar lapso del 2017, es decir, 11 puntos porcentuales por encima del avance de registrado por concepto de retiro de efectivo, según Banco Central de Reserva (BCR).
Asimismo, el momento de pagos con tarjetas de crédito creció 1%, frente al descenso del 6% que sufrió el monto de disposición de 'cash'. Mientras tanto, el monto promedio mensual de los pagos en banca virtual (pagos a través de Internet, software corporativo, banca por teléfono y banca móvil) crecieron 42% en dicho lapso, al sumar S/71.491 millones, precisa la autoridad monetaria.
Estrategias
El crecimiento registrado en los medios de pago distintos al efectivo ha respondido tanto a las estrategias de los comercios proveedores de bienes y servicios antes mencionados, como a las de las empresas del sistema financiero.
Muñiz, del BCP, estima que los casi 9 millones de tarjeta de crédito, que están en manos del 30% de la población adulta, y los otros veintitantos millones de tarjetas de débito que hay en todo el sistema financiero hacen que por lo menos haya un plástico por persona, con lo cual afirma que ya no se justifica tanto esfuerzo de las entidades por seguir colocando tarjetas.
Ahora, la visión del BCP y de todos los jugadores del ecosistema de pagos -dice Muñiz- es incentivar a que las personas usen sus plásticos. "En el caso del BCP, hemos hecho dos campañas vinculadas al mundial de Rusia 2018, que persigue que los clientes usen su tarjeta, así sea por el consumo de un sol o dos soles", comenta.
Otra estrategia de la banca para incentivar que los clientes usen sus plásticos ha sido la incorporación de sistemas de seguridad que han reducido el número de fraudes, robos de identidad, usos indebidos y clonaciones, afirma Juan Fernando Maldonado, gerente de Activos del BBVA Continental.
"En el caso del BBVA Continental, el uso de tarjetas con chip y PIN ha hecho que nuestros clientes se sientan más tranquilos", dice.
Maldonado precisa que, en el caso de las tarjetas de crédito, los esfuerzos de la banca están rindiendo sus frutos, porque hoy más clientes usan sus plásticos como medio de pago como medio de financiamiento. Y esto se puede contrastar con las operaciones de pago y de préstamos con las tarjetas de crédito. Tal como señala el BCR, en el primer trimestre del año, los pagos con estas tarjetas crecieron 1%, sin embargo, en el mismo período el endeudamiento cayó en 1.9%, según la central de riesgos Sentinel.
Yanina Cáceres, directora de Negocios Financieros del buró de créditos, asegura que otro factor que está ayudando al uso de plásticos es la incorporación de los jóvenes a estos medios de pago. Muñiz, del BCP, subraya que los jóvenes están dispuestos a cambiar de comercios si estos no aceptan sus tarjetas.
El potencial de consumo de este mercado -de entre 18 y 36 años, según Arellano- está en la mira de todo el sistema financiero, sin duda, y estas estrategias son parte de su acercamiento a ellos.
Masificar el uso de las tarjetas: los retos
Aún cuando las transacciones con tarjetas de débito y crédito han aumentado en último trimestre, Javier Álvarez, director de Estudios Multiclientes de Ipsos Perú, sostiene que las personas siguen usando efectivo.
Prueba de ello es que hay ciudades en el Perú como Huánuco, Pasco, Amazonas, Lambayeque, Tumbes, Puno en que el uso de las tarjetas de crédito y débito para disposición de efectivo supera el 50% afirma Yanina Cáceres, directora de Negocios Financieros de Sentinel.
Esta situación, a decir de Juan Fernando Maldonado, gerente de Actividades del BBVA Continental obedece a la baja penetración de puntos de venta (POS por sus siglas en inglés) en el interior del país. Según Maldonado, el 80% de los POS está en Lima y solo el 20% en provincias.
Esta situación hace que el principal reto sea masificar los terminales de aceptación.
La buena noticia es que empresas como VisaNet, a través de su subsidiaria VendeMás, han empezado a ofrecer POS de menor costo que se conectan al celular, los cuales van a aceptar los pagos no solo con tarjetas de Visa, sino también de otras marcas. Innovaciones de este tipo aumenta las posibilidades de ir ganando terreno al efectivo.
Publicado en El Comercio, 28 de mayo del 2018